Apenas recuerdo nada de la despedida de soltero, pero tengo entendido que fue un éxito. Los chicos no paran de comentarla. Me parece que Sally está un poco enfadada por haber tenido que casarse con un hombre con una sola ceja y no me importa lo que digan los demás, ¡sé que fuiste tú quien lo hizo! En todas las fotos de la boda salgo mostrando mi perfil izquierdo, pero no tiene importancia: Sally dice que es el mejor. Al parecer no está de acuerdo contigo, que dices que mi mejor perfil es el de mi cogote.
La boda fue realmente bien, ¿verdad? Pensaba que estaría hecho un manojo de nervios todo el día, pero me hiciste reír tanto que logré liberar toda la tensión nerviosa. Aunque la verdad es que no tendríamos que haber reído tanto durante la sesión de fotos: dudo de que salga alguna en la que tu cara y la mía no aparezcan deformadas por la risa. La familia de Sally se quedó prendada de ti. La verdad es que no les entusiasmaba demasiado la idea de que tuviera una «acompañante de honor», pero el padre de Sally te encontró fantástica. ¿Es verdad que le hiciste beber un chupito de tequila de un trago?
Mis padres se alegraron mucho de veros a ti y a Katie. Me encantó que Katie llevara el guardapelo que le regalé por su cumpleaños. Es curioso; mamá dice que Katie es clavada a ti cuando tenías siete años. Me parece que en parte esperaba que fueras tú y que yo volviera a tener esa edad. ¡Se pasó el día llorando! ¡Aunque no paran de decir lo guapa que estabas con tu vestido! ¡Es como si tú hubieses sido la novia!
Lo cierto es que estabas preciosa, Rosie. Creo que fue la primera vez que te he visto con un vestido (al menos desde que tenías la edad de Katie). Bueno, supongo que te habría visto llevar uno si hubiese asistido al baile de debutantes de hace unos cuantos años. Por Dios, ¿me estás oyendo? ¡Parezco un anciano rememorando los viejos tiempos!
Todo el mundo estuvo de acuerdo en que tu discurso de madrina fue genial. Me parece que todos mis amigos están chiflados por ti. Y no, no voy a darte sus números de teléfono. Por cierto, Rosie, fuiste mi acompañante de honor ese día y sigues siendo mi mejor amiga. Siempre lo serás. Que lo sepas.
La vida de casado va bastante bien, de momento. Sólo llevamos diez días casados y sólo nos hemos peleado, veamos…, diez veces. Ja, ja. Creo recordar que alguien me dijo que eso es muy saludable para la relación… No me preocupo. El sitio donde estamos pasando la luna de miel es fabuloso, cosa que me alegra porque nos está costando una auténtica fortuna. Nos alojamos en una de esas construcciones que son como cabañas de madera sujetas con postes por encima del agua. Es precioso. El agua es de ese color entre verde y turquesa y se ven los peces de colores y el fondo. Es un paraíso, te encantaría. Este es el hotel donde tendrías que trabajar, Rosie. Imagínate tener la oficina en la playa…
Me encantaría pasar el día entero haciendo el holgazán en la playa y bebiendo cócteles, la verdad, pero Sally es de las que tienen que estar haciendo algo constantemente y cada dos por tres me veo arrastrado al mar o me encuentro volando por el cielo colgado de algún artilugio. No me sorprendería que decidiera que tenemos que almorzar bajo el agua mientras buceamos.
En fin, he comprado unos regalos para ti y para Katie y espero que os hayan llegado a casa en buen estado, que nadie los haya aplastado por el camino. Aquí los consideran una especie de amuletos de la suerte y recuerdo que cuando éramos niños siempre te gustaba recoger conchas en la playa, así que ahora podrás llevar las más bonitas del planeta colgadas del cuello.
Bueno, tengo que irme. Al parecer no es normal que la gente mande postales mientras está de luna de miel y mucho menos que escriba cartas como novelas (según Sally, así que a la orden). Creo que quiere que hagamos alguna locura, como practicar esquí acuático, arrastrados por delfines, o algo así. Dios me ampare, ¡¿en qué me he metido?!
Besos,
Alex
P. D.: ¡Te echo de menos!
Tiene un mensaje instantáneo de: RUBY
Ruby: Te he visto por la ventana cuando llegabas al trabajo. ¿Qué demonios llevas colgado al cuello? ¿Son conchas?
Rosie: Traen suerte.
Ruby: Ya. ¿Y ya has notado algo?
Rosie: No se me ha escapado el autobús esta mañana.
Ruby: Ya.
Rosie: ¡Vete a la mierda!
ROSIE se ha desconectado.
De: Rosie
Para: Ruby
Asunto: No te lo vas a creer
Te paso por fax una carta que Sally le ha enviado a Katie. Dime qué opinas.
Querida Katie:
Gracias por ser mi dama de honor en mi boda la semana pasada. Todo el mundo dijo que estabas preciosa, igual que una princesa de verdad.
Alex y yo estamos de vacaciones en un sitio que se llama las Seychelles, justo donde a tu mamá le gustaría vivir. Dile que es precioso, muy cálido y soleado, y muéstrale la foto en la que salimos Alex y yo tumbados en la playa para que vea cómo es esto. Estamos muy contentos y muy enamorados.
Adjunto una foto donde salimos Alex, tú y yo el día de la boda para que puedas enmarcarla y ponerla en tu casa. Espero que te guste.
Llámanos pronto.
Besos,
Sally
Tiene un mensaje instantáneo de: RUBY
Ruby: Parece que la muy bruja esté meando alrededor de su hombre para marcar su territorio.
Rosie: ¡¡¡¿Enviándole una carta a una niña de siete años?!!!
Ruby: Bueno, es evidente que sabía que caería en tus manos. Qué crueldad. No dejes que Sally te quite el sueño. Sólo pretende dejarte bien claro quién es la mujer que ahora manda en la vida de Alex. De todos modos, ¿por qué lo hace? ¿Hiciste algo por lo que pudiera sentirse amenazada?
Rosie: ¡Qué va! ¿¡Cómo te atreves!?
Ruby: Rosie…
Rosie: Bueno, vale, puede que se sintiera un poquito amenazada habida cuenta de que Alex y yo lo pasamos mucho mejor que ella en la boda.
Ruby: ¡Zas!
Rosie: Sí, pero es lo que nos pasa siempre, Ruby. No fue un flirteo, no fue nada. En cambio, ella no sonrió una sola vez en todo el día. No hizo más que chuparse los mofletes y hacer mohines a diestro y siniestro.
Ruby: De acuerdo, te creo, pero soy la única entre millones. En fin, no le sigas el juego, pasa de ella.
Rosie: No te preocupes, no pienso darme por aludida. Lo único que me fastidia es que la muy imbécil no tenga suficiente sentido común como para dejar a mi hija al margen de sus inseguridades.
Ruby: A Katie no le pasará nada. Es una chica lista. Igual que su madre.
Querida Sally:
Gracias por tu carta. Me alegra que te gustara mi vestido. Yo en tu lugar me hubiese puesto un vestido más mono, como el de mi mamá, para el día de mi boda. Todo el mundo decía que combinaba muy bien con el esmoquin de Alex. Hacían muy buena pareja, ¿verdad? Enseñé a mamá y a Toby (mi mejor amigo) la foto donde salís tú y Alex en la playa y Toby dice que espera que tus quemaduras no te duelan mucho. Tienen muy mala pinta.
Esto es todo por ahora. Tengo que dejarte porque el novio nuevo de mamá está a punto de llegar.
Saluda a Alex de mi parte, y también de mamá y de Toby.
Besos de Katie.
Capítulo 11
De: Alex
Para: Rosie
Asunto: Novio secreto
De vuelta a casa después de la luna de miel. ¡Pillina, no me habías dicho nada de ese novio nuevo que tienes! A Sally le faltó tiempo para contármelo, lo cual me pareció todo un detalle. No sabía que Katie y Sally se escribieran, ¿tú sí?
Sea como fuere, ¿por qué no dijiste ni mu sobre ese tío durante la boda? Normalmente me lo cuentas todo. ¡Venga, larga! ¿Cómo es? ¿Cómo se llama? ¿Dónde le conociste? ¿Qué pinta tiene? ¿Cómo se gana la vida? Espero que gane un pastón y que te esté tratando bien, de lo contrario tendrá que vérselas conmigo.
Tendré que volver a Dublín para conocerle; hay que asegurarse de que cuenta con la aprobación de tu mejor amigo. En fin, cuéntame todos los detalles (bueno, quizá sea mejor que te ahorres algunos).
Hola Stephanie:
Sólo te escribo para saber qué tal estás y transmitirte una pequeña buena noticia. Estoy segura de que Rosie no te lo ha contado porque está siendo muy discreta, ¡pero ha conocido a un chico! Todos estamos encantados. Parece muy feliz, esos ojazos azules suyos ya no se ven tristes y vuelve a caminar con brío. Ya casi parece la Rosie que conocíamos.
En fin, el caso es que ayer lo trajo a casa a cenar y debo decir que es un hombre realmente encantador. Se llama Greg Collins y es el director de la sucursal de Fairview del banco AIB.
Es algo más alto que Rosie y tiene una carita muy mona. Tendrá unos treinta y pico, calculo, y se lleva de maravilla con Katie. Se pasaron el día gastándose bromas, fue muy divertido. Ha sido difícil, como bien sabes, que Rosie conociera a alguien que le gustara teniendo en cuenta que ese alguien también debía ser del agrado de Katie. Aunque yo me he cansado de decirle que no debía transigir más de la cuenta. Muchas veces ha terminado por salir con otros hombres sólo porque a Katie le caían bien. En fin, como ya he dicho, Katie adora a Greg. Me alegra tanto pensar que Rosie al parecer ha encontrado por fin a un buen tipo…
Cuéntame, ¿qué tal tu trabajo? ¿Tan ocupada como siempre? No te dejes la piel en ese restaurante, cariño; también tienes que disfrutar de la vida.
Tu padre y yo estamos pensando en tomarnos unos días de vacaciones para ir a hacerte una visita. ¿Te gustaría? Dinos cuándo estarás libre y veremos si combinamos algo. Saluda a Pierre de nuestra parte. Tengo ganas de verte.
Besos,
Mamá
De: Rosie
Para: Alex
Asunto: Re: Novio secreto
¡Vaya, mi pequeño secreto ha salido a la luz gracias a la bocazas de Katie! En fin, no dije nada acerca de Greg (se llama así) en tu boda porque para entonces ¡ni siquiera habíamos salido una sola vez! Nos conocimos en la discoteca Vaca Bailonga (¡es una larga historia!) poco antes de que me marchara a Boston. Me pidió el número y me invitó a salir, ¡pero le dije que no! ¡Y digo yo que me pondría muy efusiva después de la boda porque en cuanto regresé le llamé y le invité a salir!
¡Ay, Alex, he cenado y bebido unos vinos como nunca! Me ha llevado a restaurantes que sólo conocía por las revistas y es tan abrumadoramente romántico…, pero dijiste que no te contara todos los detalles, así que no te contaré nada del fin de semana que pasamos en el campo…